Pocas situaciones en la vida pueden desencadenar tanta conmoción y miedo como un embarazo inesperado. Para algunas mujeres, una de las principales preocupaciones (de entre muchas) es la posibilidad de que su pareja no sea un buen padre si deciden continuar. Pero quizá eso no sea algo que te preocupe en absoluto. Al contrario, tal vez creas que la personalidad, los valores y las experiencias pasadas de tu pareja harían de él un padre estupendo. ¿Y si, en lugar de dudar de su capacidad para ser buen padre, te estás cuestionando la tuya propia?
Si algo de esto te resuena, puede que te estés enfrentando a sentimientos de vergüenza conscientes o subconscientes. Debes saber que no es demasiado tarde para recorrer este viaje del embarazo con una mentalidad tranquila y segura. En el Centro de la Mujer Avenue, nos dedicamos a ayudar a las mujeres a sentirse capacitadas en sus decisiones sobre el embarazo. Con este objetivo en mente, ofrecemos servicios gratuitos al principio del embarazo, como consultas sobre opciones y ecografías médicas limitadas.
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Es normal luchar con las dudas
Ser humano es luchar con dudas sobre tus propias capacidades. Casi cualquier padre te diría que lucha con esto de vez en cuando. En realidad, es sano reconocer tus defectos(todo el mundo los tiene) siempre que utilices esa autoconciencia para buscar el crecimiento. El problema surge cuando la vergüenza nos consume, nos paraliza y toma el control de nuestra toma de decisiones. Quizá una parte de ti se siente atraída por la paternidad, pero la vergüenza y las dudas te influyen más que tus auténticos deseos de embarazo. Si es así, ¡sigue leyendo!
Una mirada objetiva pero compasiva
La gente tiene dudas sobre sus propias capacidades como padres por muchas razones diferentes. Algunas personas no tuvieron un modelo positivo al crecer, y temen «acabar» como el progenitor o progenitores que les decepcionaron. Algunos tenemos que afrontar otros retos, como problemas de salud mental, dificultades económicas, problemas de pareja o pautas de consumo de sustancias poco saludables. Otros simplemente tienen estilos de vida que no son propicios para la paternidad. Quizá ya estés centrado en prioridades importantes relacionadas con el trabajo o la familia, y sientas que no tienes espacio en tu plato para nada más.
Sea cual sea tu(s) razón(es) para cuestionar tus habilidades como madre, sin duda quieres lo mejor para todos los implicados: Tú misma, tus seres queridos y quizá también el embarazo. Quizá «lo mejor» no sea algo que creas que puedas ofrecer a un niño en este momento. Si esto te suena a verdad, definitivamente no estás sola. Muchas personas que se enfrentan a un embarazo inesperado expresan sentimientos similares. Pero, de nuevo, es importante que no dejes que la duda domine tu proceso de toma de decisiones.
Verdades para meditar
En lugar de obsesionarte con tus limitaciones y obstáculos, echa un vistazo objetivo pero compasivo a tu situación y a ti mismo. Meditar sobre algunas verdades críticas te ayudará en este proceso…
- Todos los los padres son seres humanos defectuosos. Si ya eres padre o si algún día decides serlo, lo mejor que puedes hacer es ser honesto sobre tus defectos mientras tomas medidas para convertirte en la versión más sana de ti mismo. Esta mentalidad será un buen ejemplo para los hijos que decidas tener. Les enseñará que no pasa nada por no ser perfecto. Si la paternidad te parece una lucha constante, debes saber que estás en buena compañía. Prácticamente todo el mundo tiene a veces la sensación de que este viaje es una batalla cuesta arriba. Afortunadamente, los niños no necesitan que sus padres sean perfectos. Sólo necesitan que les quieran y les cuiden.
- Nunca es demasiado tarde para aprender y crecer. ¿Tienes pautas insanas en tu vida que quieres cambiar, pero no sabes cómo «arreglarlas»? Debes saber que nunca es demasiado tarde para empezar a dar pasos hacia una mejor salud física, mental/emocional y relacional. Dejando a un lado el asunto de tu embarazo, abordar cualquier pauta perjudicial es lo mejor para ti y para tu bienestar. Casi todos necesitamos ayuda para identificar e invertir comportamientos poco saludables. No pasa nada si se trata de un proceso gradual que requiere mucho apoyo. Empieza por explorar los recursos de tu zona y apóyate en la sabiduría de personas en las que confíes y respetes.
- Siempre hay espacio para la flexibilidad creativa. Tal vez tu vida ya esté llena de prioridades que tienen valor y significado, pero una parte de ti quiere continuar con el embarazo (o al menos, considerar esta posibilidad). Si es así en tu caso, intenta mantener una mentalidad abierta respecto a tu estilo de vida. Quizá haya soluciones creativas que puedas poner en práctica para que funcione sin sacrificar tus prioridades actuales. De nuevo, apoyarte en los demás será probablemente una parte importante de este proceso. Un pequeño giro -por aterrador que sea- a veces puede ser saludable para nosotros.
Es mucho mejor tomar decisiones importantes desde la confianza en uno mismo que desde la duda. Sean cuales sean los retos a los que te enfrentes hoy, debes saber que eres capaz de superarlos y de encontrar el resultado del embarazo adecuado para ti. Busca el apoyo de personas en tu vida que afirmen tus mejores cualidades y te ofrezcan una aportación constructiva para ayudarte a crecer. Nuestro atento personal del Centro de la Mujer Avenue también está aquí para ayudarte a reforzar tu red de apoyo. Nos apasiona proporcionar la información precisa y oportuna que las mujeres necesitan para dar con conocimiento de causa los siguientes pasos en sus singulares viajes por el embarazo.
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